design by alternna
más metros no siempre es mejor
Durante mucho tiempo se ha creído que un hogar más grande equivale a una vida más cómoda. Pero la experiencia me ha enseñado que no es una cuestión de metros cuadrados, sino de cómo esos metros se diseñan, se organizan y se viven.
He visitado espacios amplios que se sienten vacíos o desordenados, y otros mucho más contenidos que sorprenden por su funcionalidad y calidez. El diseño inteligente no está en el exceso, sino en la intención: en entender la vida cotidiana, anticiparse a las necesidades reales y crear soluciones que hagan sentido a lo largo del tiempo.
Lamentablemente, seguimos viendo proyectos que privilegian la apariencia o el rendimiento comercial por encima del bienestar de quienes van a habitar esos espacios. Clósets mínimos, cocinas sin suficiente almacenamiento, nichos improvisados para lavadoras o calentadores, pasillos sin uso, muros innecesarios que limitan la luz y la fluidez. No se trata solo de construir: se trata de pensar, de habitar con visión.
Como arquitectos y diseñadores tenemos una responsabilidad profunda: proyectar espacios que respondan a la realidad de las personas, a sus ritmos, costumbres y aspiraciones. Diseñar es una forma de cuidar. Y un hogar bien pensado es una herramienta poderosa para mejorar el estilo de vida.
El valor de un hogar no está en su tamaño, está en su capacidad de hacerte sentir bien.
Pregúntate: ¿El espacio que habitas está pensado para ti?
AM